The Blessed Virgin and Saint Anne, adapted from a photo by Paul Flores; used with permission.

Home

Introduction

The Beginning

Guidelines for Mystic Spirituality

Self-help

Doctrine

Prayer

Recommended Readings

Spiritual Counsels

Consultation

Questions and Answers

Subject Index

Contact Me

Related Links

Sanación Sicológica
en la Tradición Mística Católica Romana

El Comienzo

English 

 
Introducción | Transformación | Oposición del Mundo | Negligencia | Castidad | Misticismo | La Cruz

 
DENTRO de las profundidades insondables del amor y la misericordia de Dios, podemos encontrar un gran tesoro que nos ofrece crecimiento personal, sabiduría elevada, y efectividad interpersonal mejorada. A través de una fe profunda—consistentemente vivida por un estilo de vida santo y devoto—los fastidios comunes y las ansiedades de la vida son transformados en verdadera paz—y amor.

 
Transformación

Pero, la sabiduría de la Iglesia Católica nos enseña que, como toda cosa buena, la paz y el amor tienen su precio.

Por ejemplo, cuando San Pablo fue ejecutado por los romanos, demostró que él entendía muy bien a qué se refirió Jesús cuando dijo que sus seguidores tenían que negarse así mismos y tomar sus cruces. Ya que un día, alrededor de veinte años antes de su muerte, siendo un judío celoso, que estaba de camino para perseguir a cristianos, tuvo un repentino encuentro con Cristo que lo dejó ciego. Con una humildad adquirida—pero no humillado—y alumbrado, Pablo renunció a un estilo de vida pomposo, de seguridad en sí mismo, por una vida nueva cristiana de devoción gozosa en medio de dificultades y servicio. 

  

Esta sorprendente transformación está abierta para cualquiera. Vidas de dolor y trauma, amargura y odio, vaciedad y desesperanza—vidas que, a pesar de su libre albedrío, esclavas de ceguera espiritual y sicológica—pueden sanarse y ser transformadas.
 
Pero por favor, entendamos desde el principio que la sanación espiritual sicológica es un trabajo arduo. Requiere disciplina. Es tediosa. Por lo regular da miedo. Y apunta a un hecho teológico: si fuese posible restablecer el libre albedrío humano a su estado de gracia de alguna manera que fuese fácil, Dios nunca hubiese recurrido a la Encarnación, Pasión, y Crucifixión de su único Hijo amado. 

  

Preguntas y Respuestas:
Más sobre psicología y sanación

 
 
Oposición del Mundo

El martirio de Pablo—así como el martirio de todos los cristianos, comenzando con el mismo Cristo—demuestran cuán en oposición esta el mundo a las verdades que Cristo predicó sobre la realidad del pecado, nuestra esclavitud al pecado, y nuestra necesidad de confiar totalmente en la divina misericordia. Pero aún, a pesar de la persecución que recibió, la Iglesia se mantuvo como un santuario contra el libertinaje y la impiedad del mundo pagano que le rodea.

Preguntas y Respuestas:
¿Es deprimente leer tanto sobre el pecado?

 
 
Negligencia

A través del tiempo, la tradición mística de la Iglesia Católica nos ha ofrecido todo lo que necesitamos para crecimiento, sabiduría, efectividad interpersonal, vivida consistentemente en un estilo de vida santo y devoto, de verdadera paz y amor.

¿Entonces por qué hasta los mismos católicos son negligentes y menosprecian este gran tesoro de la Iglesia?

Pues, hemos trazado mucho camino en los últimos dos mil años. La búsqueda secular moderna de diversidad cultural ha sido distorsionada con tan neurótica obsesión de ser personas “abiertas” y “acogedoras” que estamos aterrorizados de ser calificados como “criticonas”. Si nos atrevemos a hablar la verdad sobre el pecado, somos llamados “altaneros” y “arrogantes” y carentes de compasión.

  

ADVERTENCIA
Cierto material en este website puede que sea prohibido en las escuelas de California.
Para la versión políticamente correcta de California
pulsar aquí.

  

Así que, por nuestro temor a la persecución, aceptamos cualquier cosa—hasta el mismo pecado—como nuestro deber cristiano. Piensa en eso. El mundo nos ha seducido a crucificar a Cristo de día a día en el nombre de Cristo. Y la mayoría de los cristianos ni cuenta se han dado.

Estamos siendo convertidos nuevamente al paganismo por la psicología humanística. 

Y te preguntas, ¿qué tiene que ver esto con la castidad?

 
 
Castidad

En su sentido más simple, por supuesto, la castidad se refiere a abstinencia de toda actividad sexual fuera del matrimonio legítimo entre marido y mujer y, un compromiso a la santidad de la sexualidad dentro del matrimonio.

Pero como la total respuesta humana al amor divino, la castidad abarca todas las consecuencias sicológicas, sociales, y físicas de aceptar que el cuerpo es el templo del Espíritu Santo (I Corintios 6: 19) y por tanto distanciándonos a nosotros mismos de—o, en el lenguaje de las Escrituras, muriendo a—el mundo social corrupto en donde todos vivimos. 

  

Si coges los DOCE FRUTOS del Espíritu Santo—Caridad, Gozo, Paz, Paciencia, Tolerancia (aguante), Bondad, Benevolencia (amable), Apacibilidad, Fidelidad, Modestia, Continencia, y Castidad—y los mezcla todo junto, consigues una ensalada de frutas llamada cooperación mutua. La cooperación mutua es la esencia de la vida cristiana. Y la castidad es el ingrediente central en esa receta. Simplemente no puedes tener cooperación mutua si siempre estas haciendo de los demás objetos para tu placer personal.

  

En pocas palabras, la castidad no es tan sólo una actitud hacia la sexualidad humana, es la entera aceptación de la responsabilidad humana a la santidad que Cristo predicó—y vivió en su cuerpo—y que la sociedad contemporánea, con todo su “psicobalbuceo” sobre la felicidad y la auto-realización, trata de todas formas de subvertir.

La castidad entonces, es una forma de vida—la forma de vida para cualquiera que siga a Cristo y afirme ser cristiano. Y ay del alma que desdeñe la castidad, pues al final terminará con vaciedad quebrantada por siempre. El desdeñar la castidad es desdeñar a Cristo mismo, quien, en su sufrimiento físico y real en la Cruz—verdaderamente presente para nosotros en el quebrantado pan de la Eucaristía—ofrece el único remedio para sanar nuestro quebrantamiento humano.

  

Hay un sólo precio con la cual se compran las almas, y esto es sufrimiento unido al Mío en la cruz. El amor puro entiende estas palabras; el amor carnal nunca las entenderá.

  

—dicho a Santa Faustina por Jesús
(Diario, 324)

 
 
Misticismo

Y esto nos lleva a una simple definición de misticismo: una experiencia directa e inmediata de amor puro de Dios percibido como más valioso que cualquier atadura mundana y que trasciende toda percepción sentida y razonamiento lógico. Y si lees los escritos de los místicos católicos, descubrirás que, cuando hablan de amor, todos dicen lo mismo, en fiel imitación a Cristo: si quieres ascender a las alturas del amor divino, entonces prepárate para sufrir. 

Ahora, en el Prólogo de La Subida del Monte Carmelo, San Juan de la Cruz escribe que, “no estamos escribiendo de temas morales y agradables dirigidos a la clase de personas espirituales que les gusta acercarse a Dios por los caminos dulce y satisfactorios. Estamos presentando una doctrina substancial y sólida para aquellos que desean alcanzar . . . desnudez del espíritu”. Esto es una declaración fuerte, y sin embargo fue pronunciada desde toda humildad por un hombre que sabía en lo profundo de su corazón, por experiencia personal, que Dios nos llama a todos, por puro amor hacia nosotros a una santidad sanadora. Somos todos llamados a ser santos, porque los santos no nacen, se hacen. Y los santos se hacen cuando miserables corazones quebrantados se abren al amor divino, y se dedican, através del sacrificio, la obediencia y la oración al servicio a los demás.

Preguntas y Respuestas:
¿El negarse a sí mismo, significa negar la humanidad de uno?

 
 
La Cruz

Por lo tanto, si buscas sanación de tu vacío emocional y de la soledad que hoy te perturba, entonces acepta el camino místico católico de la purgación activa y pasiva de tus sentidos y despójate de tu propia auto-indulgencia y ataduras mundanas. Vence los conflictos emocionales que evitan que tú hagas lo que Cristo nos dijo a todos que hicieramos: negarse a uno mismo, tomar la cruz, y seguirle a Él (ver Mateo 16: 24).

  

Esto no es un mandato para las vírgenes obedecer y las novias ignorar, para viudas y no para las casadas, para monjes y no para hombres casados, o para el clero y no para los laicos. No, la Iglesia entera, el cuerpo entero, todos los miembros en sus distintas y variadas funciones, deben seguir a Cristo. . . . Deben tomar su cruz soportando cualquier dolor que el mundo nos causa por amor a Cristo.

  

—de un sermón por San Agustín, obispo
 Oficio de Lecturas, Común de Hombres Santos

Si, respira hondo. ¿Pues cuántos de nosotros, religiosos y laicos por igual, tratamos de seguir a Cristo sin hacer ningún esfuerzo por negarnos a nosotros mismos? ¿Cuántos de los supuestamente llamados cristianos quieren la satisfacción de poder creer que tienen la aprobación de Dios y sin embargo convierten al cristianismo en un tipo de complacencia hipócrita? ¿Cuántos de nosotros hemos sido engañados por el liberalismo [1] de la Nueva Era para “sentirnos bien” con nosotros mismos haciéndonos creer que podemos disfrutar de la gloria de la resurrección sin tener que buscar la cruz?

Aquel que no busca la cruz de Cristo
no busca la gloria de Cristo.

—San Juan de la Cruz,
Los Dichos de la Luz y el Amor,, no. 102

Por consiguiente, si de veras quieres confiar en Dios y encontrar verdadera paz sicológica y espiritual, entonces—en vez de negarte a la cruz y tomarte a ti mismo—considera los consejos de este website, en el espíritu y pena del mismo San Pablo: “Porque muchos, viven según os dije tantas veces, y ahora os lo repito con lágrimas, como enemigos de la cruz de Cristo” (Filipenses 3: 18)

 
___________

1. ¿Cuál es la diferencia entre un liberal y un conservador? Un conservador—un verdadero conservador—busca conservar el respeto hacia el misterio divino de la Encarnación y Pasión de Cristo que está detrás toda acción litúrgica de la Iglesia Católica. Un liberal profana este misterio divino al reducir la Fe a meramente una conveniencia humana y sentimentalismo. Por tanto, llámense como quieran, pero sólo un verdadero conservador puede ser un cristiano.

 

Sin publicidad—sin patrocinador—sólo la simple verdad . . .

¿Ahh? ¿Website por propia voluntad?
¿De que se trata esto?

 
Recursos Adicionales
 
On “Chastity – In San Francisco?”:


El Dulce y Satisfactorio Camino del Yo . . . pero ten cuidado . . . la única forma de escapar la oscuridad del pecado es buscar la luz de la cruz.
 
Los Conceptos Básicos de Auto-ayuda —Sacrificio, Obediencia, Oración
Sanación Espiritual —como sanar las heridas emocionales de la forma cristiana
¿Porque San Francisco?
 
PREGUNTAS Y RESPUESTAS (en ingles)
 
ÍNDICE de todos los temas en este website
 
CONTÁCTAME
 
Related pages within “A Guide to Psychology and its Practice”:
Anger: Insult, Revenge, and Forgiveness
Death—and the Seduction of Despair
Dream Interpretation
Fear of Psychotherapy
Forgiveness
Identity: Pride and prejudice, loneliness and encounter
Sexuality and Love
Spiritual Healing
Spirituality and Psychology
The Unconscious
 
INDEX of all subjects on A Guide to Psychology and its Practice
 
SEARCH A Guide to Psychology and its Practice
 
 
CONTACT ME

 


Chastity

In San Francisco?

www.ChastitySF.com

CATHOLIC PSYCHOLOGY

in association with
A Guide to Psychology and its Practice
 
Copyright © 1997-2009 Raymond Lloyd Richmond, Ph.D. All rights reserved.
San Francisco
 

All material on this website is copyrighted. You may copy or print selections for your private, personal
use only. Any other reproduction or distribution without my permission is forbidden.